sábado, 10 de abril de 2010

Embarazo en la adolescencia




El año pasado, Yuly, de 14 años, pidió de Reyes a su madre un juego de cocina. Hoy está embarazada y pide a su novio Eduardo que asuma la manutención de su futuro hijo. No quiere que el fruto de su vientre crezca como ella, que todavía desconoce a su progenitor.

Su caso no es el único. En República Dominicana una de cada cinco embarazadas es adolescente, según la Encuesta Endesa 2007 realizada por el Centro de Estudios Sociales y Demográficos (CESDEM), pero ella ignoraba que hoy sería parte de los números.

Con su mirada de infante entristecida, Yuly parece reconocer el error que ha cometido y con voz sollozante aconseja a sus amiguitas “que se protejan, que no caigan en lo mismo”.

“No sabía que eso pasaría, por eso no nos protegíamos”, reconoce la adolescente quien ni se enteró que en el barrio donde vive, Los Alcarrizos, el 3 de noviembre del año pasado, profesores y estudiantes realizaron una marcha en procura de que adolescentes como ella tengan una mejor orientación sexual.

Endesa muestra que 85% de las niñas en adolescencia tardía no utiliza métodos anticonceptivos, como Yuly que sólo había escuchado la palabra “preservativo” en un anuncio de televisión mientras pasaba los canales para ver los muñequitos.

Y mientras sigue contando su historia, se acaricia el crecido vientre, consciente de que en unos 6 meses tendrá ese niño en sus manos, porque solo Dios evitará que su vástago pueda nacer.

viernes, 9 de abril de 2010

Erradicar la pobreza extrema y el hambre






La pobreza extrema sigue siendo una realidad cotidiana para más de 1.000 millones de seres humanos que subsisten con menos de 1 dólar por día. El hambre y la malnutrición afectan a un número poco menor de personas, pues hay: más de 800 millones de personas cuya alimentación no es suficiente para satisfacer sus necesidades energéticas diarias. En el caso de los niños pequeños, la falta de alimentos puede ser peligrosa porque retarda su desarrollo físico y mental y pone en peligro su supervivencia. Más de una cuarta parte de los niños menores de 5 años de los países en desarrollo sufren de malnutrición.

Superar la pobreza y el hambre es un objetivo alcanzable. En Asia se han logrado reducciones espectaculares de la pobreza: el número de personas que viven con ingresos inferiores a 1 dólar por día se redujo en casi 250 millones entre 1990 y 2001, que fue un período de rápido crecimiento económico. En los 10 últimos años, el hambre se redujo en un 25%, como mínimo, en más de 30 países. De los cuales, 14 se encuentran en el África subsahariana, la región más afectada por el hambre y la malnutrición.

jueves, 8 de abril de 2010

Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente




Para alcanzar la sostenibilidad del medio ambiente es fundamental que los recursos naturales se utilicen de forma inteligente y que se protejan los ecosistemas complejos de que depende nuestra supervivencia. Debe tenerse en cuenta que, la sostenibilidad no podrá lograrse con los modelos actuales de consumo y uso de recursos. Los suelos se están degradando a un ritmo alarmante. Las especies vegetales y animales están desapareciendo a un ritmo sin precedentes. Los cambios climáticos están provocando una elevación del nivel del mar y acrecentando el peligro de sequías e inundaciones. Se sobreexplotan la pesca y otros recursos marinos.

Los pobres de las zonas rurales son los más afectados por esta situación porque, por lo general, para subsistir dependen de los recursos naturales que tienen a su alrededor. Si bien el éxodo a las zonas urbanas ha reducido la presión sobre las zonas rurales, también ha provocado un aumento del número de personas que viven hacinadas y en tugurios inseguros en las ciudades. Tanto en las zonas urbanas como en las rurales, miles de millones de personas carecen de agua potable y de instalaciones básicas de saneamiento.

La superación de estos y otros problemas ambientales hará necesario prestar una mayor atención a la situación de los pobres y establecer un nivel de cooperación mundial sin precedentes. Las medidas adoptadas para detener la destrucción de la capa de ozono son muestra de que es posible avanzar siempre que exista voluntad política para ello.

miércoles, 7 de abril de 2010

Combatir el VIH/SIDA




En los 25 años transcurridos desde que se declaró el primer caso de SIDA, esta enfermedad se ha convertido en la principal causa de muerte prematura en el África subsahariana y en la cuarta causa de muerte a nivel mundial. Más de 20 millones de personas han muerto en todo el mundo desde que comenzó la epidemia, y a finales de 2004, había unos 39 millones de personas que vivían con el VIH. En los países más afectados, la epidemia del SIDA, además de provocar incalculables sufrimientos ha dado marcha atrás a los progresos de desarrollo que habían tardado décadas en conseguirse. Casi ningún país se ha librado de esta amenaza.

Ahora bien, hay países que están combatiendo la epidemia - y venciéndola. Tailandia y Uganda han demostrado que se pueden reducir las tasas de infección si se cuenta con una visión y un liderazgo adecuados, por lo que son un ejemplo para otros países azotados por el SIDA.

Otras enfermedades, que no han recibido tanta atención de los medios de información, están minando solapadamente la vitalidad y las esperanzas de los habitantes del mundo en desarrollo. Todos los años el paludismo provoca 1 millón de víctimas mortales, la mayoría de ellas niños, y se estima que ha contribuido a reducir el crecimiento económico en los países africanos en un 1,3% al año. Ha resurgido la tuberculosis, que se consideraba erradicada, en parte debido a la aparición de cepas resistentes a los medicamentos y a la vulnerabilidad provocada por el VIH y el SIDA. No es sorprendente que estas tres enfermedades se concentren en los países más pobres; cabe señalar que podrían combatirse en gran medida mediante actividades de educación y prevención y, cuando aparecen brotes de ellas, mediante tratamiento y atención.